Job 1-5
1- Job 1:6; 2:1). ¿A quiénes se les permitía presentarse ante Jehová? Entre aquellos que tomaban su puesto delante de Jehová se contaban su Hijo unigénito (la Palabra), los ángeles fieles y los hijos angélicos de Dios que habían sido desobedientes, incluido Satanás (Juan 1:1, 18). Estos últimos no fueron expulsados del cielo sino hasta poco después del establecimiento del Reino de Dios, en 1914 (Revelación [Apocalipsis] 12:1-12). Al permitirles estar en su presencia, Jehová expuso delante de todas las criaturas espirituales el desafío y las cuestiones que planteó Satanás.
2- Job 1:7; 2:2). ¿Habló Jehová a Satanás directamente? La Biblia no da muchos detalles sobre cómo se comunica Jehová con las criaturas espirituales. No obstante, el profeta Micaya tuvo una visión en la que un ángel conversaba directamente con Jehová (1 Reyes 22:14, 19-23). Por lo tanto, parece que Jehová habló con Satanás sin un intermediario.
3- Job 1:8-11; 2:3-5). Como muestra el caso de Job, para ser íntegros a los ojos de Jehová no basta con acciones y palabras adecuadas; también hay que servirle con el motivo correcto.
4- Job 1:21). ¿En qué sentido podía Job regresar al ‘vientre de su madre’? Puesto que Jehová formó al hombre “del polvo del suelo”, el término “madre” se usa aquí en sentido figurado para referirse a la tierra (Génesis 2:7).
5- Job 1:21, 22). Si somos fieles a Jehová en circunstancias tanto favorables como desfavorables, probaremos que Satanás es un mentiroso (Proverbios 27:11).
6- Job 2:4) ¿Quién es la persona más importante de nuestra vida? El Diablo, aseguró que si Job sufría el dolor en carne propia, terminaría demostrando con sus actos que Jehová no era la persona más importante para él. Algunos biblistas señalan que la frase “piel en el interés de piel” da a entender que Job era tan egoísta que, a fin de salvar su propio pellejo, o vida, estaba dispuesto a aceptar que sus hijos y sus animales perdieran el de ellos, es decir, que murieran. Otros opinan que la expresión indica que, para no morir, la gente llega a sacrificar un poco de piel. Por ejemplo, a veces evitan los golpes en la cabeza poniendo por delante un brazo y, en efecto, pierden algo de piel para preservar la vida. Sin importar cuál sea el sentido exacto del modismo, las implicaciones son claras: se afirma que, con tal de sobrevivir, Job entregaría con gusto todo lo que poseía.
7- Job 2:5) Satanás afirmó que Job renegaría de Dios si perdía la salud. Hoy el Adversario también se vale de nuestras dolencias, intentando, por ejemplo, que nos sintamos inútiles por culpa de ellas. Jehová jamás nos rechazará si no podemos dedicarnos tanto a su servicio como antes. Pensemos en lo que haríamos nosotros si un buen amigo fuera atacado y quedara malherido. ¿Lo apreciaríamos menos porque ya no puede hacer lo mismo que antes? ¡Por supuesto que no! Lo seguiríamos queriendo y cuidando, y más aún si sufrió las heridas por tratar de ayudarnos. Entonces, ¿deberíamos esperar menos de Jehová? La Biblia contesta muy claro: “Dios no es injusto para olvidar la obra de ustedes y el amor que mostraron para con su nombre” (Heb. 6:10).
8- Job 2:9). ¿En qué estado de ánimo se encontraba posiblemente la esposa de Job cuando le dijo a este que maldijera a Dios y muriera? Ella había sufrido las mismas pérdidas que él. Le debe haber dolido muchísimo ver a su esposo —que en un tiempo había sido una persona vigorosa— abatido por una repugnante enfermedad. Además, había perdido a sus queridos hijos. Todo esto debió dejarla tan consternada que no percibió lo realmente importante: la relación de ellos con Dios.
9- Job 2:9, 10). Al igual que Job, hemos de permanecer firmes en la fe, incluso si nuestros familiares no aprecian nuestras actividades espirituales o nos presionan para que transijamos en asuntos relacionados con la fe cristiana o para que renunciemos a ella.
10- Job 2:13). Los compañeros de Job no tenían nada animador que decir acerca de Dios y sus promesas porque carecían de visión espiritual.
11- Job 4:7, 8). No debemos apresurarnos a concluir que la persona que sufre está cosechando lo que ha sembrado y carece de la aprobación divina.
12- Job 4:15, 16). ¿Qué clase de espíritu había influido en el pensar de Elifaz? El tono crítico de sus siguientes palabras indica claramente que se trataba de una criatura espiritual perversa, y no de uno de los ángeles justos de Dios
13- Job 4:18, 19) Nuestros consejos han de estar basados en la Palabra de Dios, no en opiniones personales (2 Timoteo 3:16).
14- Job 4:19, 20) Satanás utilizó a Elifaz uno de los tres “amigos” que fueron a visitar a Job para afirmar que los seres humanos son tan débiles que no pueden resistir las pruebas. Elifaz señaló que “moran en casas [o cuerpos hechos] de barro, cuyo fundamento está en el polvo”, y agregó: “Los aplasta uno más rápidamente que a una polilla. De la mañana al atardecer son triturados; sin que nadie lo tome a pecho, perecen para siempre”.
15- Job 4:21) Elifaz asemejó la muerte a arrancar la cuerda de una tienda, lo que haría que esta se desplomase.
16- Job 5:4) Aplastar al afligido en la puerta’ denotaba corrupción judicial, pues en ellas se trataban cuestiones legales.
17- Job 5:21) Elifaz el temanita habló del “látigo de una lengua” (una expresión con la que probablemente se refería al uso de la lengua para hacer daño, como en el caso de la calumnia y del habla injuriosa. (Compárese con Pr 12:18; Snt 3:5-10.)
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